Gabriel Picart

Gabriel Picart, nacido en Barcelona (1962).
 La carrera de Picart se inició como ilustrador; trabajó en comisiones en toda Europa. Picart ganó rápidamente las asignaciones de todas las grandes editoriales en Estados Unidos y Canadá. Picart trabajó también para las agencias de publicidad, empresas de diseño gráfico y casas de catálogo, y comenzó a mostrar su obra en la Sala Parés de Barcelona - una galería de gran prestigio.
En 1996, tuvo su primera exposición en la Galería WolfWalker en Sedona, Arizona. Esto fue seguido rápidamente por su participación en una exposición colectiva de artistas catalanes de Ambassador Gallery de Nueva York, donde fue uno de algunos de los pintores figurativos contemporáneos
 destacados que trabajan en España en ese momento.

Las pinturas de Picart han atraído una atención especial de los críticos notables y coleccionistas, y que están o han estado en exhibición en algunas de las galerías más reconocidas en los EE.UU., se cuelgan con titanes del pincel, como Chagall, Miró, Dalí y Picasso, y algunos de los de arte contemporáneo más importantes encontrados en el mundo de hoy.
 En Galerías de Anderson, en particular, sus pinturas han colgado con las de Bouguereau, uno de los héroes de pintura de Gabriel.

"Yo soy un 'pintor de estudio'. Mis pinturas son demasiado laboriosas para ser ejecutadas al aire libre. La luz natural cambia muy rápidamente y es imposible trabajar sobre un mismo objeto durante mucho tiempo seguido. Existe un beneficio añadido al hecho de trabajar en el estudio:  puedo liberar mi imaginación y permitir que mis impresiones personales y recuerdos salgan a la superficie, idealizando de este modo el motivo pictórico."  _(G.Picart)_

"Lo mejor de pintar bodegones es que tengo el absoluto control sobre la obra. No dependo del modelo ni del paisaje. Yo selecciono los objetos que quiero pintar y los coloco cómo quiero. También decido que iluminación quiero. Lo creo todo desde el principio." _(G.Picart)_

"Cuando visité Menorca por vez primera, no pude resistir la tentación de crear una serie de pinturas basada en elementos arquitectónicos de la isla, en concreto, del pequeño pueblo de Binibeca. Los elementos arquitectónicos ondulantes se asemejan mucho a las formas arquitectónicas de las obras 

del arquitecto catalán Antoni Gaudi (aunque algo más simples y de color blanco) y confieren un movimiento a la composición que considero muy interesante.

 Estas obras figurativas, de cierta evocación 'minimalista', han obtenido una gran aceptación por la simplicidad de su composición y la claridad de la luz." _(G.Picart)_

"Aunque mis obras en general, y mis bodegones en particular, pueden parecer hiper-realistas vistos en formato reducido o desde cierta distancia, mi estilo pictórico es el Realismo. Yo me considero un pintor realista clásico, no fotográfico: en mis obras las pinceladas son visibles y la imitación 

de la realidad tan sólo aparente. Es aquí donde reside la verdadera magia de la pintura." _ (G.Picart)_

"Yo no escojo mis temas pictóricos por su 'originalidad', sino por el reto que entrañan. Me gusta mantenerme a una prudente distancia de modas y tendencias actuales. Mi anhelo es que mis obras resistan el paso del tiempo." _ (G.Picart)_

"Los antiguos Egipcios usaban la misma palabra –'SESH'– para denominar 'Pintar' y 'Escribir', porque para ellos ambas significaban los mismo: comunicar. Para mi también." _ (G.Picart)_